Las lluvias están visitando toda España en este primaveral abril. Era algo que hacía muchísima falta después de un invierno muy seco que hacía pensar en lo peor para el verano. Por suerte llegó el agua y en Asturias los pantanos se han llenado al 89%, prácticamente al límite de seguridad.
Además el descenso de las temperaturas ha dejado algo de nieve en las montañas y los más fervientes esquiadores se curan las ganas de ponerse las tablas estos días después de una temporada que no les dio muchas oportunidades.
La lluvia es realmente una bendición del cielo y abril, como recoge nuestro refranero, es su mes estrella. Nuestros amigos de Córcega tienen también uno que dice:Aprile face trenta, per piove trent´unu ùn face male à nisunu! (Abril tiene 30 días, pero si llueve 31 no hace mal a nadie). De todas formas tampoco creo que se queje nadie si el tiempo nos da una tregua entre tanta agua.