Garbanzos, lentejas, alubias, guisantes,… los devotos de la cuchara en la mesa vemos reconocida este año la sana costumbre de tener presentes en nuestra dieta tan versátiles y sabrosos alimentos.
Las señoras y señores de Naciones Unidas posan su mirada esta vez sobre estos vegetales excepcionales desde todo punto de vista: además de poder comprarse a precios razonables, su contenido en proteínas, vitaminas, minerales e hidratos de carbono hacen de las legumbres un alimento completísimo que previene la diabetes, las enfermedades del corazón, el cáncer y combate la obesidad.
El cultivo de legumbres ayuda a fertilizar el suelo de forma natural fijando el nitrógeno atmosférico y propiciando la aparición de bacterias beneficiosas, lo que reduce la necesidad de abonos químicos y si añadimos su extraordinario aprovechamiento del agua en su crecimiento estaremos ante uno de los productos más sostenibles del menú diario.
Por si fuera poco no hay niño o niña a quien no le guste algún tipo de legumbre en alguna de sus elaboraciones, lo que supone un modo excelente de introducir a los más pequeños en los buenos hábitos alimenticios recomendados por los más entendidos.
