Terminó la esperada reunión de Copenhague en la que se dieron cita 190 países con sus mejores propósitos para vivir en un mundo menos contaminado. Son reuniones éstas un tanto decepcionantes pues los países más contaminantes saben que sus ricas o deseosas de ser ricas (emergentes) economías siguen dependiendo de lo que contaminan y las economías pobres, que sólo tienen aire puro quieren que se les ayude con dinero a ver si así también ellos crecen y contaminan como los guays.
El que os escribe ve que el problema parte de que el cambio climático está produciendo un calentamiento global y lo cierto es que todo el mundo rico agradece el calor porque se gasta menos en energía y porque a la gente de aquí, lo que nos gusta es que haga bueno. Otro gallo nos cantaría si se estuviese girando hacia un planeta más frío y en verano tuviésemos que encender la calefacción y quedarnos sin ir a la playa porque estuviésemos a 5 grados. Y algo parecido se puede decir de la molesta lluvia.
La cumbre sobre el calentamiento de la Tierra se convoca en Dinamarca y en diciembre, creo yo que porque no hay mucha prisa todavía por encarar el problema, de otro modo se convocaría en Senegal y en Agosto. Pero el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ya ha reconocido que el acuerdo de mínimos liderado por Estados Unidos y China, no cumpliendo con las expectativas suscitadas, es sin embargo «un importante comienzo».
A esperar y a disfrutar del buen tiempo.
Santi.